El síndrome de Hiperlaxitud Articular, una enfermedad poco conocida, provoca la excesiva flexibilidad de las articulaciones. El tejido colágeno del organismo es más elástico, pero también más frágil, lo que puede originar lesiones articulares. Es importante la detección temprana, tanto para la prevención, como para no confundirlo con otras enfermedades más graves con síntomas similares.

(1/06/06 – CyTA-Instituto Leloir. Por Maria Cristina Chaler) – La hiperlaxitud articular se ve frecuentemente en la práctica clínica, constituye una amplia proporción, tanto de adultos como de niños, que son referidos a las consultas de reumatología para explicar síntomas musculoesqueléticos. Cuando la hiperlaxitud produce síntomas se dice que la persona padece síndrome de Hiperlaxitud Articular (SHA).

Los síntomas son similares a los que se ven en otras enfermedades hereditarias del tejido conectivo, como el síndrome de Marfan, la osteogénesis imperfecta y el síndrome de Ehlers-Danlos, pero a menudo son menos severos. Muchos científicos opinan actualmente que el SHA es idéntico al síndrome de Ehlers-Danlos tipo Hiperlaxitud, anteriormente denominado tipo III.

Según Rodney Grahame, del Hipermobility Clinic, UCL Hospital, de Londres, la hiperlaxitud articular es un signo común a todas las enfermedades hereditarias del tejido conectivo, pero es también un signo altamente prevalente en la población en general. En la actualidad no se conoce si existe alguna variedad de hiperlaxitud (sintomática o no) que no sea parte de una enfermedad hereditaria del tejido conectivo.

Los doctoras Carmen L. De Cunto, Marta B. Moroldo, Diana I. Liberatore, de la sección de Reumatología e Inmunología del Hospital Italiano de Buenos Aires, y el doctor Eduardo Imach, en consultorios externos del mismo hospital, realizaron durante el 2001 una investigación sobre una población de niños sanos de una escuela privada de Capital Federal, con el objetivo de determinar la prevalencia de hiperelaxitud articular (HA) en ese grupo de niños en edad escolar y registrar la aparición de síntomas músculo esqueléticos asociados.

La prevalencia de hiperlaxitud articular que encontraron en el grupo de niños estudiados fue del 12 al 34 %. Esta frecuencia varía con la edad, ya que sólo el 23% de los niños mayores de 10 años son hiperlaxos. En este mismo grupo las mujeres resultaron más laxas que los varones.

Sin duda, hay beneficios para quienes tienen hiperlaxitud articular. Por ejemplo, las personas hiperlaxas pueden realizar con ciertas ventajas un número de actividades físicas, como la danza y la gimnasia. Vista de este modo, la hiperlaxitud parece un factor positivo, por ejemplo, para las niñas en las escuelas de ballet. Pero la predisposición a las lesiones hace que estos beneficios tengan corta duración, sobre todo en lo que respecta a las bailarinas.

Cualquier niño que tiene antecedentes de haber podido realizar trucos malabares con sus articulaciones o contorsionismos, o que ha teindo una notable facilidad para el ballet, la gimnasia o las acrobacias a una edad temprana, es problable que sea hiperlaxo. La investigación también ha demostrado que los violinistas, flautistas y pianistas de todas las edades con articulaciones de los dedos laxas, tienden a padecer menos dolor que sus compañeros menos flexibles.

El problema aparece cuando se manifiestan síntomas. Los síntomas más frecuentes del SHA son las molestias en músculos y articulaciones, que afectan sobre todo a los miembros inferiores. Estos dolores ocurren sin causa aparente, en ocasiones influenciados por los cambios de clima y, en las mujeres, por el ciclo menstrual. También puede presentarse una cierta rigidez.

Los síntomas aparecen desde la adolescencia y pueden persistir toda la vida. En ocasiones se producen derrames articulares, normalmente a causa de un esfuerzo o sobrecarga, sobre todo en las rodillas. A veces se escuchan “chasquidos”, que no tienen importancia, pero resultan desconcertantes y alarmantes para quienes los padecen.

Todo esto suele acompañarse con debilidad de los tejidos, lo que produce bursitis, tendinitis, subluxaciones (huesos que se salen de su sitio), dolor de espalda, lumbago y problemas como osteoporosis precoz, hernias, pieles blancas y varicosas, y en casos más graves trastornos cardíacos.

Con respecto al origen del síndrome, se estima que el 50 % de los casos se debería a anomalías hereditarias, que padecerán la mitad de los hijos. El 50 % restante podría deberse a una mutación genética, ya que hay enfermos cuyos padres no padecen la enfermedad. Estas mutaciones estarían debidas a la carencia de ácido fólico en el período periconcepcional (desde 3 meses antes de la concepción del embrión).

Diagnosticar el SHA no es fácil. En algunos casos, sólo se registra laxitud en las pequeñas articulaciones de las manos, en otros, el problema es generalizado. Suelen ser característicos el dolor articular y muscular, así como las lesiones a repetición.

En casos de SHA la artrosis (desgaste de las articulaciones) suele ser frecuente y aparece precozmente debido a la fragilidad de los cartílagos y a la excesiva movilidad articular. Lo mismo ocurre con la osteoporosis temprana.

Es muy importante que los enfermos ya diagnosticados eviten extender las articulaciones hiperlaxas y no practiquen en lo posible deportes de contacto, como el rugby, fútbol, voleibol o el karate. Si hacen estas actividades deben tomar la precaución de usar protectores en las muñecas, codos, rodillas y tobillos.

El diagnóstico temprano ayuda a adoptar medidas que mejoran la condición de quien sufre de SHA, ya que un adulto que padece este síndrome sin saberlo comienza a tener tendinitis, esguinces, subluxaciones recurrentes, dolor de espalda y otros de los síntomas mencionados. No obstante, resulta conveniente realizar un diagnóstico diferenciado, para no confundir a este síndrome con enfermedades que poseen síntomas parecidos, pero son más graves.

Recuadro

ALTERACIONES HEREDITARIAS DE LA FIBRA COLÁGENA (AHFC)

Síndrome de Ehlers-Danlos (SED) (hay 6 tipos distintos)

SED Tipo III que es muy frecuente. Para algunos científicos es lo mismo que el Síndrome de Hiperlaxitud Articular (SHA). En él predomina la laxitud articular, pero no siempre es generalizada y a veces afecta una o pocas articulaciones.

SED Vascular (Llamado antes SED Tipo IV). Es poco frecuente, afecta a una entre cada 6.500 personas. Es más grave, por lo que es necesario hacer el diagnóstico precozmente, ya que se puede asociar a problemas cardiovasculares e incluso a la ruptura de órganos, como el pulmón, colon y útero grávido. Debido a la fragilidad capilar se caracterizan por tener moretones fáciles y frecuentes, a veces sin causa aparente. Entre otros problemas vasculares destacan el prolapso de la Válvula Mitral y condiciones más graves como aneurismas cerebrales y rupturas arteriales. Estos enfermos tienen sólo hiperlaxitud de las pequeñas articulaciones de las manos. Son capaces de extender las articulaciones de los dedos más allá de lo normal. Para el diagnóstico, es importante la existencia de una historia familiar de complicaciones arteriales o de ruptura de órganos e incluso de muerte súbita de algún familiar joven, sin causa aparente.

Síndrome de Marfan

Es una enfermedad hereditaria de la fibra colágena, también potencialmente grave y que requiere atención médica, ya que algunas complicaciones importantes se pueden prevenir. Afecta a una entre cada 12.000 personas. En general son personas muy altas y delgadas, con extremidades superiores largas y dedos alargados, con hiperlaxitud articular. Puede afectar al corazón, arteria aorta, pulmones (neumotórax espontáneo), ojos (desviación del cristalino, miopía y desprendimiento de la retina), articulaciones, ligamentos y huesos (osteoporosis). Pueden tener escoliosis, pecho excavado, dolores de espalda, etc. Aparece como un rasgo familiar, ya que varios familiares pueden tener estas características, en mayor o menor grado. El diagnóstico se hace si existen las características del aparato locomotor, más las alteraciones oculares descritas o compromiso cardiovascular. Tanto el SEDV como el MF pueden tener piel suave y transparente, moretones, escleras (fondo blanco del ojo) celestes y otros signos ya descritos para el SHA.

Osteogénesis Imperfecta

Es otra enfermedad hereditaria de la fibra colágena que se caracteriza por tener osteoporosis severa y gran tendencia a las fracturas. Tienen escleras azules. Es muy poco frecuente, afecta a una de cada 100.000 personas.