(25/04/06 – CyTA – Instituto Leloir) – La antigua ciudad de Alejandría, bañada por las aguas del Nilo, habría sido habitada por primera vez al menos hace 4500 años, más de dos milenios antes de la llegada de Alejandro Magno, según descubrieron científicos de la Universidad Paul Cézanne, de Aix-en-Provence, Francia.
El equipo de investigadores, liderado por Alain Véron, midió las variaciones en la concentración de plomo en un núcleo de sedimentos del viejo puerto de Alejandría. Determinando la antigüedad de caracoles marinos hallados en el núcleo, mediante la técnica del carbono 14, Véron y sus colegas observaron cómo habían cambiado los niveles de plomo a través de los siglos, según informa la revista NewScientist de abril.
Los investigadores encontraron picos de contaminación con plomo entre 2686 y 2181 a. C. y otra vez entre 1000 y 800 a. C., asociados con actividades humanas como la plomería, la pesca y la construcción, conclusión coincidente con antiguos textos que mencionan la existencia de un asentamiento contemporáneo de nombre Rakotis.
Los niveles de plomo se dispararon alrededor del 330 a. C., época en que llegó Alejandro Magno a la ciudad y volvieron a subir 400 años después, ya en tiempos del Imperio Romano.
El descubrimiento comprobaría que Alejandro Magno no fue el fundador de la mítica ciudad egipcia, sino que la rebautizó a su llegada, dato que pondría punto final a un prolongado debate sobre el origen de la ciudad, hasta ahora sólo basado en evidencias literarias.