Las autoridades sanitarias de Australia declararon el estado de alerta tras detectarse un caso de poliomielitis 21 años después de su erradicación. La persona infectada es un joven que había regresado de Pakistán, donde la enfermedad todavía es endémica. Ante el riesgo de aparición de casos importados, la Argentina reacciona intensificando la vigilancia y la aplicación de la vacuna Sabin.

(17/7/07 – Agencia CyTA-Instituto Leloir. Por Florencia Mangiapane) – El Ministerio de Salud australiano emitió el viernes pasado un alerta ante el primer caso positivo de polio después de 21 años de ser erradicada la enfermedad en aquel país.

El mensaje, firmado por el funcionario médico de mayor rango de Australia, y disponible en el sitio oficial del Ministerio www.health.gov.au, informa que las autoridades sanitarias del estado de Victoria reportaron un caso de polio en un varón de 22 años que había regresado a Melbourne en avión unos días antes, procedente de Pakistán.

Para reducir todo lo posible el riesgo de sufrir un brote de polio por virus importado, la Organización Mundial de la Salud recomienda a los países mantener un alto nivel de inmunización de la población y reforzar la vigilancia.

Siguiendo este criterio, el Ministerio de Salud argentino solicitó a las autoridades provinciales, tal como lo hace de forma rutinaria, que se intensifique la vigilancia y se confirme la aplicación del esquema nacional de vacunación con Sabin.

No ocurría desde 1986

“El último caso de infección con poliovirus salvaje en Australia ocurrió en 1986, y la Región del Pacífico Occidental, incluida Australia, fue declarada libre de polio en 2000, por lo que cualquier caso de polio constituye una preocupación importante en materia de salud pública”, señala John Horvath, el funcionario australiano.

La Comisión Australiana de Protección de la Salud ya está rastreando a los pasajeros que viajaron con el paciente, y procedió a aislar a su círculo más cercano. Entre otras medidas, habilitaron una línea telefónica para que se comuniquen los pasajeros del vuelo de la empresa Thai Airlines que llegaron a Melbourne el 2 de julio pasado desde Bangkok.

Se considera que las 249 personas que compartieron el viaje con el joven tienen bajo riesgo de contraer la enfermedad. Lo mismo se supone respecto de la posible transmisión a la comunidad. Sin embargo, dado el carácter altamente infeccioso de la polio, las autoridades están extremando las medidas de precaución.

Mientras tanto, el paciente, que se está recuperando de su parálisis inicial, se encuentra internado y aislado en el Hospital Box Hill. Según www.polioeradication.org, se trata de un estudiante que vive en Melbourne, y que al volver de una visita a Pakistán ingresó al hospital con fiebre, vómitos y dolores musculares.

La poliomielitis, también llamada parálisis infantil o enfermedad de Heine-Medin, se produce por la destrucción de las neuronas motoras de la médula espinal y deja secuelas en los grupos musculares con atrofia de miembros inferiores. Ha sido erradicada en la mayor parte del mundo, pero todavía se la considera endémica en la India, Pakistán, Afganistán y Nigeria.

En Pakistán ocurrieron nueve casos desde enero de este año, en comparación con once reportados durante el mismo período en 2006. Allí circulan los poliovirus 1 y 3. El primero es particularmente severo porque produce más reacciones inmunes y es responsable de grandes brotes, no sólo de casos esporádicos.

La Argentina mantiene la vigilancia

Al conocer la noticia del caso australiano, y teniendo en cuenta que en cuestión de horas una persona infectada puede llevar el virus de un país a otro, el Ministerio de Salud argentino informó a las Direcciones de Epidemiología de las provincias sobre la posibilidad de aparición de casos por virus importado, como hace habitualmente.

En la Argentina, el último caso de polio ocurrió en 1984. El continente americano quedó totalmente libre de ese virus diez años más tarde. El último caso se registró en Perú, donde en 1991 un niño fue afectado por el tipo 1.

Enterado de la situación australiana, el Ministerio de Salud argentino solicitó a las autoridades provinciales que continúen con la vigilancia y la notificación de todo caso de parálisis fláccida aguda, con toma adecuada de materia fecal para su estudio y seguimiento clínico.

También recordó la necesidad de confirmar la vacunación con Sabin de acuerdo al esquema nacional. Manteniendo la cobertura con tres dosis de Sabin por encima de 95% en cada municipio de cada provincia se asegura que no se disemine un virus importado, al no haber personas susceptibles de contraer la enfermedad.