En una misma noche, el cielo dará un doble espectáculo: un eclipse lunar y el ocultamiento de la estrella Regulus. La cita será desde las últimas horas del 20 de febrero hasta la madrugada del 21. Además, durante este mes, puede observarse con facilidad al astro “Cancri 55”, que forma parte de un sistema de dos soles con cinco planetas extrasolares.
(18/02/08 – Agencia CyTA_Instituto Leloir. Por L.G.O) – Los observadores amateurs de la luna y las estrellas tienen varias citas importantes en febrero. El primer eclipse total de luna del año ocurrirá entre las últimas horas del miércoles 20 de febrero y la madrugada siguiente. Esa misma noche, los curiosos tendrán la oportunidad de observar la “desaparición” de una estrella muy brillante de la constelación de Leo, llamada Regulus.
Como si eso fuera poco, en el cielo podrá distinguirse con facilidad en la constelación de Cáncer, a una de las brillantes estrellas de Cancri 55, un sistema binario –de dos astros–, alrededor del cual giran cinco planetas.
El primer eclipse lunar del 2008 comenzará a las 23:42 del 20 de febrero, y a las 3 de la madrugada del 21 ya podrá observarse a simple vista. El último ocurrió el 28 de agosto de 2007.
El eclipse total de Luna se produce cuando el satélite natural está en su fase llena y la Tierra se ubica entre él y el Sol. Un observador puede ver cómo la Luna “ingresa” en la sombra del planeta terrestre y va adquiriendo un color rojizo debido a la luz que refracta la atmósfera terrestre.
Por otro lado, el ocultamiento de la estrella Regulus se producirá a las 20:44:25 de la hora oficial argentina, y su reaparición tendrá lugar a las 21:31:44, según un comunicado de la Asociación Argentina de Amigos de la Astronomía (AAAA).
Alejandro Blain, director de dicha entidad, con sede en Parque Centenario, en Buenos Aires, contó a la Agencia CyTA que ese tipo de fenómenos pueden observarse de manera frecuente con diferentes tipos de astros. “Todas las noches, al describir su órbita alrededor de la Tierra, la Luna produce la ocultación de estrellas. Para los astrónomos es importante registrar la hora exacta de la desaparición de la estrella porque el dato permite confrontar las teorías de los movimientos planetarios y la determinación del tiempo”, explicó Blain. Para los curiosos amateurs, se trata de un festín visual.
“En el caso de la estrella Regulus, como es de gran brillo, puede ser más fácilmente detectable. El brillo de la Luna llena es muy intenso y nos deslumbra, lo que dificulta mucho la observación de fenómenos como éste con estrellas de menor brillo”, señaló el experto.
Blain agregó que la sede de la asociación astronómica ofrecerá “varios telescopios, un sistema digital de proyección de imágenes en pantalla gigante y varios especialistas para satisfacer las inquietudes de los curiosos que se acerquen al lugar”.