Hasta el momento se pensaba que una gran explosión estelar conocida como \”nova\” originaba polvo en el espacio. Sin embargo, mediante el uso de dos grandes telescopios instalados en Hawai, astrónomos de la NASA hallaron evidencias de la presencia previa de estos elementos. El estudio forma parte de los esfuerzos por conocer los últimos estadios evolutivos de las estrellas. Astrónomos de Hawai y de La Plata explican el fenómeno.

(01/02/08 – Agencia CyTA_Instituto Leloir. Por Laura García Oviedo) – Son grandes explosiones de estrellas, conocidas como “novas”. Si bien es difícil observar los elementos que las rodean por la gran cantidad de luz que emiten, científicos de la NASA hallaron evidencias sobre la presencia previa de polvo en una nova de la constelación Ophiuchus. Hasta ahora, se creía que ese tipo de explosiones creaba el polvo.

Para estudiar el fenómeno, los científicos utilizaron un instrumento que se llama interferómetro Keck. Es un sistema compuesto por un par de telescopios que trabajan conectados en Hawai, en los Estados Unidos. Ese tipo de tecnología bloquea la luz de una estrella, y permite que los astrónomos puedan estudiar el ambiente y los objetos que las rodean.

El sistema estudiado se llama “RS Oph” y está ubicado en la constelación Ophiuchus. Está compuesto por dos estrellas, una enana blanca y una gigante roja. Mientras que la gigante roja está en pleno proceso de perder sus capas gaseosas, la masa de la enana blanca no para de crecer. Se produce una transferencia de masa, y por el aumento de temperatura se producen explosiones termonucleares que causan el fenómeno brillante conocido como nova.

Algunas de las explosiones previas de “RS Oph” se registraron en 1898, 1933, 1958, 1967 y 1985, según informa el comunicado del Laboratorio de Propulsión a Chorro (JPL, por sus siglas en inglés), de la NASA. Los científicos detectaron la nueva explosión de la estrella en febrero de 2006.

OJOS FILTRADORES DE LUZ

“Una creencia común es que una pequeña fracción del material expulsado durante una explosión nova se condensa, bajo ciertas condiciones, formando polvo. De manera sorprendente, el instrumento Keck revela polvo preexistente a la explosión en la nova, sugiriendo así un mecanismo físico diferente que podría ser responsable de la formación de polvo en esta nova recurrente”, contó a la Agencia CyTA el manager de operaciones Sam Ragland, del Observatorio Keck.

Ragland agregó que las actividades del Interferómetro Keck comenzaron a mediados de 2004 de forma piloto. Las primeras observaciones fueron obtenidas en mayo de 2005, y el programa científico oficial se lanza este mes (febrero de 2008). El instrumento es parte de un programa de la NASA para observar varios fenómenos, como la búsqueda de planetas que orbitan otras estrellas.

Los datos sobre el sistema de estrellas que generó la nova fueron tomados por un equipo del JPL de la NASA, y la información analizada por sus colegas del Centro Espacial “Goddard”, de los Estados Unidos.

ESTRELLAS BINARIAS

“Las novas son estrellas que aumentan mucho de brillo y luego el mismo decae lentamente, por eso antiguamente se pensaban que eran estrellas nuevas, y de ahí su nombre. En general están asociadas a sistemas binarios en los que al menos una de las componentes es una enana blanca”, explicó el astrónomo Claudio Quiroga, de la Facultad de Ciencias Astronómicas y Geofísicas de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP).

“El estudio de este tipo de estrellas es importante para conocer los últimos estadios evolutivos de las estrellas y cómo cambian cuando la estrella no es un cuerpo aislado como nuestro Sol. Además, el estudio de la transferencia de masa puede ser aplicado a un montón de objetos, en particular los siempre mediáticos agujeros negros, ya que sólo pueden ser detectados por interacción con otro objeto”, agregó el doctor en astronomía.

Según explicó Quiroga, el sistema “RS Oph” donde se observa la nova es un sistema binario simbiótico (son dos estrellas que interactúan). “Haber hallado polvo es importante en el sentido de que no se espera que esta simbiótica particular tenga mucho polvo. De todas formas, el polvo se formaría lejos de las estrellas, donde la temperatura es baja y es posible su existencia”, dijo el investigador, que forma parte de un grupo que estudia estrellas simbióticas y binarias relacionadas.

Con todo, las novas no dejan de sorprender.

RECUADRO

INTERFERÓMETRO A CONTRALUZ

(01/02/08 – Agencia CyTA_Instituto Leloir. Por L.G.O.) –“El interferómetro Keck nos permite discernir un nivel de detalle en el cielo que no tiene precedentes. Esto es muy importante para entender varios fenómenos astrofísicos. En particular, nos permite estudiar los ambientes cercanos a estrellas donde ocurren fenómenos como la formación de planetas”, dijo a la Agencia CyTA Taft Armandroff, director del Observatorio Keck, desde Kamuela, Hawai.

Los interferómetros consisten en dos o más telescopios dotados de instrumental adecuado para superponer la radiación captada de las estrellas. La técnica genera grandes expectativas en la comunidad científica por la posibilidad de estudiar fenómenos que hasta ahora no se han podido estudiar por la interferencia de la luz.

Según explicó el astrónomo Claudio Quiroga, de la Facultad de Ciencias Astronómicas y Geofísicas de la Universidad Nacional de La Plata, al bloquear la luz proveniente de las estrellas “la interferometría infrarroja permite que la respuesta obtenida sea mucho más sensible y por tal razón permitiría estudiar en mucho más detalle zonas que, aún con los más potentes telescopios, no se han podido estudiar”.

Algunos de los fenómenos que se podrán observar, y estudiar, mediante esta técnica es el medio que rodea a estrellas calientes y jóvenes, las regiones de polvo en torno a estrellas frías donde podrían formarse planetas extrasolares, y la determinación de componentes estelares en sistemas binarios. Los astrónomos también quieren apuntar los telescopios hacia los núcleos de galaxias activas, para observar su dinámica y morfología. El universo, al alcance de la mano.