Tras la aprobación, en noviembre de 2007, de una ordenanza de la ciudad de Neuquén que prohíbe fumar en bares y restaurantes, un trabajo publicado en la revista Tobacco Control señala que mejoró la función respiratoria de los empleados gastronómicos. Si bien los resultados son coincidentes con estudios similares publicados en países desarrollados, es la primera vez que se obtienen datos concretos de una ciudad de América Latina.
(14/07/10 – Agencia CyTA-Instituto Leloir)-. La salud de los empleados gastronómicos de Neuquén mejoró en forma notable luego de que en esa ciudad se aprobara en noviembre de 2007 una ordenanza que prohíbe fumar en bares y restaurantes de esa ciudad. A esta conclusión llegó un equipo de investigadores que compararon resultados de estudios de salud realizados a 198 empleados no fumadores un mes antes y tres meses después de la entrada en vigor de dicha prohibición. El trabajo fue publicado en la edición de abril -del presente año- de la revista Tobacco Control, editado por el British Medical Journal Publishing Group.
“Además de pedirles a los empleados que respondieran cuestionarios relativos a su salud, evaluamos su capacidad respiratoria a través de espirometría (un aparato que mide la capacidad respiratoria)”, indicó la autora principal del estudio, la doctora Veronica Schoj, coordinadora de la Alianza Libre de Humo de Tabaco – Argentina (ALIAR). Y continuó: “Gracias a la ordenanza aprobada en Neuquén, que estableció ambientes cien por ciento libres de humo de tabaco en bares y restaurantes, el porcentaje de trabajadores que manifestaba síntomas respiratorios (tos, flema , sensación de falta de aire y dolor de pecho, entre otros) experimentó una reducción de cerca de un 58 por ciento a un 29 por ciento. Asimismo, el porcentaje de 86 por ciento de empleados con síntomas de irritación (picazón de garganta, estornudos y ojos rojos, entre otros), se redujo a un 37 por ciento aproximadamente. Además la función respiratoria por espirometría mejoró en un 7 por ciento lo cual es muy significativo, teniendo en cuenta que se trataba de trabajadores y trabajadoras no fumadoras”.
Por otra parte, el estudio indicó que el apoyo a las leyes de ambientes cien por ciento libre de humo de tabaco ajeno fue de 93 por ciento en el grupo de los empleados no fumadores y de casi 83 en el caso de los trabajadores que sí fumaban. “Este respaldo evidenció el fuerte respaldo de los trabajadores a la ordenanza adoptada a favor de su salud.”
Leyes por la salud pública
El estudio publicado en la mencionada revista destaca que seis provincias de la Argentina (Santa Fe, Tucumán, Neuquén, Córdoba, Mendoza y Entre Ríos) y cerca de 17 ciudades del país han adoptado –entre 2006 y 2009- leyes de ambientes cien por ciento libres de humo de tabaco ajeno que incluyen a bares y a restaurantes.
Estudios similares ya habían sido publicados en numerosos países desarrollados de todo el mundo, con idénticas conclusiones y esta es la primera vez que una investigación de este tipo se desarrolla en Latinoamérica, destacó la autora principal de la investigación.
“Esta clase de estudio epidemiológico y estadístico demuestra que las legislaciones que limitan el consumo de tabaco impactan en forma notable en la salud pública”, afirmó Schoj. Y continuó: “es fundamental que las leyes garanticen ambientes 100 por ciento libres de humo de tabaco y que no permitan la habilitación de áreas para fumar en bares, restaurantes, como sucede aun en la ley de la Ciudad de Buenos Aires, dado que estas áreas para fumar son ineficaces para proteger la salud y discriminatorias para los trabajadores de estos lugares que son condenados a trabajar en ambientes laborales insalubres con un altísimo riesgo de padecer enfermedades respiratorias, cáncer de pulmón y enfermedades cardiovasculares”.
Para garantizar la protección de la salud de todos los trabajadores “necesitamos una ley nacional que establezca ambientes 100 por ciento libres de humo en todos los lugares públicos y laborales cerrados, sin excepción y sin aceptar falsas soluciones como los aparatos purificadores de aire. Además Argentina necesita ratificar el Convenio Marco Para el Control del Tabaco (CMCT), a fin de garantizar una política de Estado de apoyo a la salud publica y solidarizarse con la comunidad internacional en esta iniciativa global para reducir la mortalidad que provoca el consumo de tabaco y la exposición a humo de tabaco ajeno”, afirmó Schoj.
Las cinco medidas principales del CMCT, impulsado por las Organización Mundial de la Salud, son la creación de ambientes 100 por ciento libres de humo para todos los lugares públicos y de trabajo, la eliminación casi completa de toda forma de publicidad de productos de tabaco que influye en la iniciación del tabaquismo en los chicos. El aumento de precios de los cigarrillos para desalentar su consumo. La presencia de advertencias en los paquetes de cigarrillos con fotos sobre los efectos perjudiciales del tabaco y por último la implementación de medidas que promuevan y garanticen el acceso de las personas adictas al tabaco a los tratamientos para dejar de fumar.
La función respiratoria de los empleados gastronómicos no fumadores mejoró en un siete por ciento luego de que se aprobara en noviembre de 2007 una ordenanza que prohíbe fumar en bares y restaurantes en la ciudad de Neuquén.
Créditos: Mark Gary