La relación de la humanidad con la naturaleza debe ser transformada a la luz de los cambios que se evidencian en las lluvias, temperaturas, glaciares, aumento del nivel del mar y otras consecuencias en nuestro planeta. “La indecisión e inacción continua nos puede llevar a un desastre nunca visto por la Humanidad”, afirmó el investigador Pablo Canizani en el marco de un taller internacional en la UCA sobre efectos del adelgazamiento de la capa de ozono.
(15/03/2013 – Agencia CyTA-Instituto Leloir)-. El cambio climático es un claro ejemplo de la desconexión de los sistemas políticos y económicos con la realidad geofísica del planeta. Así lo afirmó a la Agencia CyTA el doctor Pablo Canziani, investigador principal del CONICET y director del Programa de Estudios de los Procesos Atmosféricos en el Cambio Global de la Universidad Católica Argentina (UCA).
Canziani destacó que el tratado internacional denominado Protocolo de Montreal, que entró en vigor a principios de enero de 1989, inició la recuperación de la capa de ozono austral a través del control y reducción de la emisión de gases industriales del tipo clorofluoruros de carbono (CFC). “Este acuerdo es un ejemplo concreto de interacción exitosa entre el sistema científico y el sistema político. Sin embargo, en lo que se refiere al cambio climático, la indecisión e inacción continua nos puede llevar a una situación nunca vista por la Humanidad”, destacó en el marco del taller internacional “Efectos climáticos del adelgazamiento de la capa de ozono austral” del Programa Mundial de Investigación del Clima, que depende de la Organización Meteorológica Mundial, la Comisión Oceanográfica Intergubernamental y el Consejo Internacional para la Ciencia.
El cambio climático se refleja en el derretimiento de glaciares, en los cambios de las temperatura y de las precipitaciones y en el aumento del nivel del mar como producto de la interacción de los ciclos naturales de la Tierra con actividades humanas tales como la quema de combustibles, la expansión de la frontera agropecuaria, malas prácticas agroproductivas e ineficencia energética. “Si la humanidad no actúa ahora se podrían alcanzar puntos de quiebre en el comportamiento del sistema climático y en los sistemas sociales, ambientales y ecosistemas, lo que podría eventualmente amenazar la supervivencia de la vida en el planeta”, alertó.
Los participantes del taller, que contó con el apoyo de la Fundación Nacional de Ciencia de los Estados Unidos, remarcaron la necesidad de fortalecer los sistemas de observación y monitoreo de los fenómenos que ocurren en el mar, los hielos y la atmósfera, entre otras dimensiones, para conocer la dinámica de su interacción. “También es preciso mejorar los modelos de simulación para conocer los posibles escenarios que afecten al planeta y aportar así al área de toma de decisión y gestión por parte de los países”, agregó Canziani.
Investigadores argentinos y del exterior en el Taller Internacional sobre efectos climáticos del adelgazamiento de la capa de ozono austral realizado en la Universidad Católica Argentina.
Créditos: Departamento de Comunicación de la UCA.