Un estudio financiado por la NASA en la provincia de Buenos Aires identificó restos de hierbas y compuestos orgánicos en fragmentos de vidrios que se crearon luego del impacto de cuerpos celestes, hace cientos de miles o millones de años. Los científicos creen que se podría usar el mismo método para rastrear evidencias de vida pasada en el Planeta Rojo.
(11/06/2014 – Agencia CyTA – Instituto Leloir)-. El impacto de asteroides y meteoritos puede causar estragos, pero también puede conservar en buenas condiciones rastros de vida antigua. Así lo demuestra un estudio financiado por la NASA que acaba de ser publicado en la revista “Geology”.
Un equipo liderado por el doctor Pete Schultz, geólogo de la Universidad Brown en los Estados Unidos, encontró rastros de hojas y compuestos orgánicos capturados en fragmentos de vidrio creados por grandes impactos de un meteorito en la región pampeana bonaerense. “El material podría proporcionar una instantánea de las condiciones ambientales en el momento del impacto”, señaló Schultz a la Agencia CyTA. “El hallazgo también sugiere que a través del estudio de estos objetos se podrían buscar signos de vida remota atrapados en vidrios originados por impactos similares en Marte”, añadió.
Las muestras de vidrio estudiadas tienen una antigüedad que van de menos de 500.000 años a más de 9 millones de años. “Los fragmentos de hierbas que identificamos en su interior se asemejan a las que crecen actualmente en las pampas. El análisis químico de las muestras reveló también la presencia de hidrocarburos orgánicos, que son las pruebas químicas de la presencia de la materia viva”, indicó Schultz.
Los suelos que se encontraban bajo el impacto del meteorito se funden a temperaturas superiores a 1.600 grados. “Hemos sido capaces de descubrir que los compuestos orgánicos sobrevivieron al intenso calor “, dijo el investigador estadounidense, quien visita Argentina casi todos los años desde hace más de dos décadas. “Crecí en el centro de Estados Unidos y la pampa me recuerda a esa región. Cuando voy, me siento como en casa”, señaló.
“Es un descubrimiento realmente espectacular”, dijo a la Agencia CyTA el doctor Ari Iglesias, investigador del CONICET en el instituto de Investigaciones en Biodiversidad y Medioambiente (INIBIOMA), en Río Negro, Argentina, al ser consultado por el estudio de Schultz.
Se habían reconocido restos orgánicos que escapan de la quema de paleo-incendios de la era de los dinosaurios, pero ahora este nuevo estudio permite establecer que es posible una forma distinta en la búsqueda de vida en lugares externos a nuestro planeta Tierra, explicó Iglesias. Y agregó que las “burbujas” que atrapan restos de vida dentro del vidrio proveniente del impacto de meteoritos permiten un nuevo campo de estudio en lo que se denomina la astro-biología, “un campo científico algo escaso en Argentina”.
El estudio de impactos de meteoritos podría servir también para revelar más información sobre el ambiente de los dinosaurios. “Por ejemplo, se tienen registros de esferulitas (vidrio producto de impacto meteórico) del límite Cretácico-Terciario. Si se hallan materiales orgánicos dentro de ellos se podría inferir las circunstancias por las cuales se extinguió más del 60% de la fauna y flora del mundo en esa Gran Extinción Masiva que en parte aniquiló el gran grupo de los dinosaurios”, resaltó Iglesias.
El estudio de “burbujas” que atraparon restos de vida dentro del vidrio generado por el impacto de meteoritos en la región pampeana bonaerense revela un novedoso método para buscar vida en Marte.
Créditos: Pete Schultz