El estudio internacional, del que participaron científicos argentinos, revela la conexión entre poblaciones de Europa y los primeros nativos americanos.
(14/01/2015 – Agencia CyTA-Instituto Leloir)-. Un consorcio internacional de científicos, que incluye investigadores argentinos de la UBA y del CONICET, concluyó que la mayoría de los europeos derivan de al menos tres poblaciones ancestrales distintas: los cazadores-recolectores de Europa occidental, los euroasiáticos antiguos del norte y los agricultores tempranos europeos.
El hallazgo también revela la conexión de los europeos con los primeros habitantes americanos. “El ADN de los euroasiáticos antiguos del norte parece haber contribuido en la configuración de los europeos actuales y en la gente que viajó a través del Estrecho de Bering hacia América hace algo más de 15.000 años”, señaló a la Agencia CyTA una de las autoras del estudio, la doctora Graciela Bailliet, investigadora del CONICET y vicedirectora del Instituto Multidisciplinario de Biología Celular (IMBICE), en La Plata.
Para llegar a esos resultados, los investigadores realizaron la secuenciación genómica de muestras provenientes de un agricultor temprano de Stuttgart (Alemania), de unos 7.000 años de antigüedad; de un cazador-recolector de Luxemburgo, que vivió hace 8.000 años; de siete cazadores-recolectores antiguos que habitaron en lo que hoy es Suecia, hace 8.000 años; y de 2.345 personas de 203 poblaciones actuales.
El trabajo publicado en Nature también destaca que los agricultores del cercano oriente y sus descendientes europeos presentaron alrededor de un 44% de ancestría proveniente de linajes basales euroasiáticos, que fueron los primeros linajes que se separaron del resto de los linajes no-africanos.
“El enorme caudal de información que se genera con estos estudios hace posible responder un sinnúmero de preguntas evolutivas e históricas sobre la configuración actual de las poblaciones humanas”, dijo Bailliet. “Probablemente, también sea el camino para comprender muchas problemáticas relacionadas con la salud.”
En el estudio también participó el doctor Daniel Corach del Servicio de Huellas Digitales Genéticas de la Facultad de Farmacia y Bioquímica de la UBA; y el doctor Claudio Bravi, investigador del CONICET del Laboratorio de Genética Molecular Poblacional del IMBICE y docente de la Facultad de Ciencias Naturales de la Universidad Nacional de La Plata.
La doctora Graciela Bailliet (der.), investigadora del CONICET y vicedirectora del Instituto Multidisciplinario de Biología Celular (IMBICE), en La Plata, y el doctor Claudio Bravi, investigador del CONICET del Laboratorio de Genética Molecular Poblacional del IMBICE y docente de la Facultad de Ciencias Naturales de la Universidad Nacional de La Plata.