El estudio se hizo en Ushuaia, pero los investigadores creen que podría aplicarse a otras ciudades del país. “Es necesario implementar intervenciones inmediatas para reducir las conductas de riesgo peatonal”, afirman investigadores del CONICET que condujeron el estudio.
(Agencia CyTA-Fundación Leloir)-. De acuerdo con la Organización Panamericana de la Salud (OPS), una de cada cinco muertes de tráfico involucra a peatones. Ahora, un estudio del CONICET y de la Universidad Nacional de Mar del Plata (UNMdP) confirma que la conducta de la “gente de a pie” es más riesgosa de lo que se asumía.
En un estudio realizado sobre 802 personas en cruces peatonales en tres intersecciones de Ushuaia, en Tierra del Fuego, apenas un 7% realizó su trayecto completo por la senda marcada. Y solo cuatro de cada diez se detuvieron antes de bajar el cordón, respetaron el semáforo y evaluaron el paso de vehículos previamente a cruzar.
Por otra parte, cerca del 12% cruzó la intersección de manera distraída, sobre todo mirando sus celulares. Y las mujeres mostraron ser un poco más prudentes que los hombres.
“El trabajo sugiere una alta prevalencia de comportamientos de riesgo entre los peatones”, afirmó a la Agencia CyTA-Leloir el doctor Rubén Ledesma, director del grupo “Modelos y Métodos en Psicología del Tránsito” del Instituto de Psicología Básica, Aplicada y Tecnología (IPSIBAT), que depende de la Facultad de Psicología de la UNMdP y del CONICET.
De acuerdo con Ledesma, es posible que los comportamientos observados en Ushuaia sean similares en otras ciudades del país, “aunque las conductas viales también son muy sensibles al contexto y las diferencias culturales. “
El hallazgo “alerta sobre la necesidad de implementar intervenciones inmediatas para reducir las conductas de riesgo peatonal, adoptando enfoques que combinen cambios ambientales con educación vial”, puntualizó Ledesma, quien también es investigador del CONICET.
El especialista también resaltó que los estudios observacionales deberían guiar el diseño de cruces que promuevan conductas más seguras, por ejemplo, la demarcación de sendas en lugares que respeten más los trayectos naturales de los peatones.
El estudio fue publicado en la revista “Traffic Injury Prevention” y también lo firmaron el doctor Fernando Poó (CONICET/UNMDP) y el licenciado Roberto Trujillo (UNMDP).