Un material de envase bicapa desarrollado por científicos de La Plata actúa como barrera al oxígeno, al vapor de agua y a la radiación UV preservando la calidad de alimentos susceptibles de sufrir rancidez.
(Agencia CyTA-Fundación Leloir)-Investigadores argentinos desarrollaron un envase que conserva por más tiempo la calidad de la harina de nuez.
“Por estar formulado con compuestos biodegradables, el envase que desarrollamos es amigable con el ambiente, además de preservar la calidad del producto en beneficio de la salud de los consumidores”, afirmó a la Agencia CyTA la directora del estudio Adriana Pinotti, perteneciente al Centro de Investigación y Desarrollo en Criotecnología de Alimentos (CIDCA), con sede en la ciudad de La Plata.
Pinotti, y dos integrantes de su grupo, Javier Lamarra y Sandra Rivero, diseñaron un material compuesto por una capa de quitosano con nanopartículas funcionalizadas con ácido gálico con propiedades antimicrobianas y antioxidantes y una capa de alcohol polivinílico mediante la técnica de termocompresión. La aplicación de estos materiales activos en el envasado de alimentos susceptibles de sufrir oxidación representa una alternativa sustentable.
La harina de nuez, un subproducto de la producción del aceite de nuez, posee una cantidad remanente de lípidos después del proceso de extracción que pueden oxidarse por exposición a diferentes factores tales como luz, humedad, presencia de oxígeno, entre otros.
Tal como revela la revista “International Journal of Biological Macromolecules”, los científicos platenses envasaron el alimento durante 105 días en condiciones de humedad controlada y a distintas temperaturas de almacenamiento. Los investigadores observaron que el envase desarrollado condujo a un retraso en los procesos de oxidación lipídica del alimento.
De acuerdo con el primer autor del estudio, Javier Lamarra, becario posdoctoral del CONICET en el CIDCA (UNLP-CONICET-CIC), el envase que desarrollaron posee nanocápsulas de ácido gálico, un compuesto activo con propiedades antioxidantes y antimicrobianas, capaz de absorber radiación UV.
De este modo, los investigadores pudieron combinar materiales biodegradables y obtener un sistema bicapa activo con propiedades de barrera al UV, al vapor de agua y al oxígeno adecuadas para envasar un alimento susceptible de sufrir oxidación como la harina de nuez. “Los resultados en esa dirección demostraron que estos materiales retrasaron los procesos de autooxidación lipídica”, destacó Lamarra.
El sistema desarrollado se encuentra en fase experimental a escala de laboratorio, explicó Lamarra, también auxiliar docente de la cátedra de Fisicoquímica Facultad de Ciencias Exactas de la UNLP. “Sería necesario escalarlo a nivel planta piloto y evaluar la factibilidad de adaptación del procedimiento a la planta de procesamiento o línea de producción de materiales”, indicó.