Aunque las evidencias muestran que tomar estos medicamentos no agrava el cuadro infeccioso, un equipo de investigadores argentinos estudia muestras de pulmón y de sangre para examinar los mecanismos moleculares que median el efecto.
(Agencia CyTA-Leloir)-. Varios estudios epidemiológicos realizados por investigadores de China, Estados Unidos, Italia y otros países indican que las drogas antihipertensivas no aumentan la probabilidad de contraer el nuevo coronavirus (SARS-CoV-2) ni aumentan el riesgo de muerte. Ahora, un equipo de científicos argentinos realiza estudios para profundizar los mecanismos moleculares que intervienen en ese proceso.
Cuando comenzó la pandemia se pensaba que esos fármacos podían aumentar la susceptibilidad de las personas a los efectos del COVID-19. “Esta hipótesis se basó con evidencias existentes de que los hipertensivos que interfieren con el sistema renina-angiotensina-aldosterona aumentan los niveles de ACE2, un receptor en la membrana de las células que funciona como llave de entrada para el virus”, explicó la doctora en química Mariela Gironacci, investigadora del CONICET e integrante del comité ejecutivo de la Sociedad Interamericana de Hipertensión.
Esos antihipertensivos incluyen algunos fármacos muy populares como enalapril, perindopril, valsartán o losartán, que interfieren con una enzima que fabrica angiotensina II (una potente sustancia que contrae los vasos sanguíneos y aumenta la presión arterial) o bloquean un receptor sobre el que actúa para producir sus efectos.
Sin embargo, estudios retrospectivos realizados en diferentes países mostraron que el análisis del porcentaje de muertes por COVID-19 no identificó diferencias significativas entre hipertensos tratados con este tipo de antihipertensivos comparados con los normotensos u otros antihipertensivos. Y un flamante estudio prospectivo realizado en Brasil también constató que, en pacientes hospitalizados por COVID-19 leve a moderado, suspender o continuar tomando esos fármacos no hace diferencia.
Niveles de ACE2 en pulmones
Si bien los estudios epidemiológicos establecen que el uso de estos antihipertensivos es seguro en pacientes con COVID19, falta responder preguntas sobre los efectos que producen a nivel molecular en el organismo en relación con la infección por coronavirus.
Hasta el presente, diversos estudios indican que los antihipertensivos aumentan los niveles de la ACE2 en corazón y riñón de animales. Aún resta determinar si estos antihipertensivos modifican la expresión de la ACE2 en pulmón, un objetivo al que apunta un proyecto que lidera Gironacci con colegas del Hospital Municipal de Vicente López “Prof. B. Houssay” y del Hospital Provincial de Tórax “Dr. A. Cetrángolo”.
El estudio encabezado por Gironacci es retrospectivo y consiste en el análisis molecular de muestras de pulmón de pacientes tratados con estos antihipertensivos.
A través del análisis de las muestras, Gironacci y colegas establecerán la distribución y el contenido de la ACE2 y de TMPRSS2, otra proteína clave para la entrada del virus, y de dos péptidos, angiotensina 1-7 y angiotensina II, que son componentes clave en la regulación de la presión arterial.
“La proteína ACE2 (aumentada por efecto de las drogas antihipertensivas) degrada a la angiotensina II que produce aumento de la presión arterial, para generar a la angiotensina 1-7, que tiene efectos completamente opuestos”, explicó Gironacci, también investigadora del Instituto de Química y Fisicoquímica Biológicas (IQUIFIB), que depende de la UBA y del CONICET.
El proyecto de los investigadores, que cuenta con el apoyo de la Agencia de Promoción de la Investigación, el Desarrollo Tecnológico y la Innovación (Agencia I+D+i), también apunta a medir en sangre en pacientes con COVID-19 cuánta ACE2 tienen circulando.
“Nos interesa comprender mejor los mecanismos moleculares que actúan en los pacientes hipertensos con COVID-19 que toman fármacos para controlar la presión arterial, lo que podría inspirar nuevos tratamientos”, indicó Gironacci, quien también dirige la Revista de la Sociedad Argentina de Hipertensión Arterial.