Trepar hasta la punta de un edificio de 30 pisos será dentro de poco un juego de niños. Un nuevo dispositivo, inventado por un estudiante de ingeniería mecánica del Massachusetts Institute of Technology (MIT) permitirá escalar grandes alturas en cuestión de segundos. Prevén emplear el instrumento en operativos de rescate y actividades de exploración, entre otras posibles aplicaciones.

(16/02/07- Agencia CyTA. Instituto Leloir. Por Florencia Mangiapane) – Nathan Ball es un estudiante fuera de serie. Conocido dentro del célebre Massachusetts Institute of Technology (MIT) por su capacidad de inventiva, esta vez volvió a sorprender a sus maestros. Ball, que se prepara para obtener su título de ingeniero mecánico, acaba de crear un elevador de cuerdas con motor del tamaño de una herramienta eléctrica de mano, un dispositivo que pocos superhéroes se animarían a despreciar.

Caracterizado por un ingenioso mecanismo de manejo de cuerdas y alimentado por baterías, el artefacto ideado por Ball permite que un bombero con equipos de hasta 40 kilos alcance la punta de una torre de 30 pisos en apenas medio minuto, cuando transportar esa misma carga por una escalera puede llevarle por lo menos seis. Con una sola carga de batería, el dispositivo permite levantar 100 kilos hasta una altura de 180 metros al ritmo de tres metros por segundo.

El avance, dado a conocer esta semana por la oficina de prensa del MIT, lleva el nombre “Atlas” y le valió al estudiante el premio Lemelson-MIT del año, que consiste en 30.000 dólares. Según el comunicado de la institución estadounidense, el diseño creado por Ball está en parte inspirado en el mecanismo de manejo de cuerdas que utilizan los barcos para subir y bajar las anclas.

En el caso del elevador Atlas, una cuerda estándar -de poco más de un centímetro de diámetro- se entreteje en una serie de rodillos especiales ubicados sobre un eje giratorio, que funciona a batería. Cada vez que el eje rota, la cuerda se enrosca con más fuerza dentro del dispositivo, para hacer frente al peso por subir.

El autor del invento explicó que el dispositivo podrá usarse para tareas de rescate, andinismo y exploración de cavernas, entre otras. “Ayudará a desarrollar las tareas con mayor eficiencia y evitando que las personas gasten energía en trepar escaleras y transportar cargas pesadas”, comentó Ball.

El estudiante, que pronto conducirá un reality show inspirado en la ingeniería para chicos de entre 9 y 13 años, también se dedica a asesorar a inventores principiantes. Experiencia relevante no le falta: entre sus desarrollos anteriores se cuenta un aporte para mejorar la técnica de inyección libre de agujas creada por el Laboratrio de Bioinstrumentación del MIT, otro invento capaz de salvar vidas y con numerosas aplicaciones comerciales.

Más información: http://web.mit.edu/newsoffice/2007/lemelson-0214.html