Con el almidón de dos cultivos adaptados a la región del nordeste argentino, la mandioca y la ahipa, investigadoras de la Universidad Nacional de La Plata y del CONICET desarrollaron películas biodegradables destinadas a la fabricación de envases. Este tipo de materiales, más amigables con el ambiente que los plásticos, podría servir como un vehículo de aditivos específicos como saborizantes, colorantes, conservantes, o nutrientes beneficiosos para la salud en una amplia gama de alimentos.
(19/07/10 – Agencia CyTA – Instituto Leloir)-. En el campo de la ciencia básica, investigadores de la Argentina y del exterior realizan una multiplicidad de experimentos y desarrollos para crear envases que sean biodegradables.
“Con el propósito de atenuar los problemas de contaminación, se han realizado numerosos estudios para valorar algunos materiales alternativos. En ese sentido, surgió el concepto de materiales biodegradables, asociado al uso de materias primas renovables, que reemplacen o al menos limiten el uso de materiales sintéticos que constituye una fuente importante de contaminación ambiental a nivel mundial”, señalaron a la Agencia CyTA las doctoras María Alejandra García y Olivia López del Centro de Investigación y Desarrollo en Criotecnología de Alimentos de la Facultad de Ciencias Exactas Universidad Nacional de La Plata (UNLP) –CONICET.
Un trabajo de las ambas especialistas demostró la utilidad que presentan las películas elaboradas a base de almidón de mandioca y ahipa para el desarrollo de envases destinados a diferentes productos, entre otras aplicaciones industriales. El estudio fue seleccionado por un comité de científicos durante las “II Jornadas Internacionales sobre Avances en la Tecnología de Películas y Coberturas Funcionales en Alimentos”, celebradas recientemente en la ciudad de Buenos Aires. Los parámetros para elegir a este, y otros dos trabajos, fueron la calidad científica, la originalidad, el impacto social, su alcance y su carácter innovador.
“Uno de los objetivos de nuestra línea de trabajo es proponer un uso innovador para el almidón extraído de la mandioca y la ahipa para desarrollar envases para alimentos a partir de películas biodegradables”, afirmó la doctora García. Y agregó: “Las películas que desarrollamos no solo serían útiles para el envasado de alimentos, sino que también podrían ser un vehículo de aditivos específicos como saborizantes, colorantes, conservantes, o nutrientes beneficiosos para la salud en una amplia gama de productos comestibles. Este tipo de materiales podría aplicarse también como recubrimiento en la superficie de alimentos y consumirse con el mismo sin necesidad de su remoción, dado que el almidón es comestible.”
Mandioca y ahipa
Según indicó García, la obtención de almidón de raíces y tubérculos como la mandioca y la ahipa requiere tecnologías sencillas y disponibles. “Además, una de las ventajas que ofrece la ahipa (planta originaria de Sudamérica, que actualmente se encuentra restringida a la región de los Andes bolivianos y el norte de Argentina) es que podría convertirse en un cultivo alternativo y/o complementario al de mandioca ya que posee una alta tolerancia al ataque de plagas, entre otras cualidades”, destacó la investigadora de la UNLP.
La técnica para desarrollar las películas, al decir de las investigadoras, es simple. “Consiste en el rallado de las raíces de la ahipa y la mandioca, su mezcla con agua y su posterior filtración para obtener una lechada desde la cual el almidón se recupera por decantación”, explicó García. Y continuó: “Luego a partir del almidón extraído, se prepara una suspensión de almidón gelatinizado por calor (en condiciones similares a las que se utilizan para la cocción de postres a base de almidón) a la que se agrega el plastificante, que es necesario para que la película sea flexible. Luego la suspensión se vierte sobre placas de acrílico, se secan en estufa y luego se las remueve.”
De acuerdo con las especialistas de la UNLP, las propiedades fundamentales de las películas obtenidas son su transparencia, resistencia y flexibilidad para el envasado de alimentos. “Además esta tecnología es de bajo costo ya que se utilizan almidones nativos que se extraen mediante un proceso simple”, destacaron las doctoras García y López. Y concluyeron: “Así, el desarrollo y caracterización de películas biodegradables a partir del almidón de raíces constituirían una alternativa viable para la obtención de envases compatibles con el medio ambiente muy interesantes para el sector industrial dado que el almidón es una fuente de macromoléculas, con propiedades adecuadas para la formulación de películas, muy abundante y de bajo costo.”
Las “II Jornadas Internacionales sobre Avances en la Tecnología de Películas y Coberturas Funcionales en Alimentos” fueron organizadas bajo el patrocinio de CYTED, con el apoyo del CONICET y el auspicio de la Fundación Instituto Leloir. También auspiciaron el evento el Centro de Investigación y Desarrollo en Criotecnología de Alimentos (UNLP-CIC-CONICET), el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI), y el Instituto de Ciencia y Tecnología de los Alimentos-Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) de España.
Películas biodegradables de almidón de ahipa y mandioca.
Créditos: Centro de Investigación y Desarrollo en Criotecnología.