Nadie pone en duda hoy que la exposición a la luz solar aumenta la probabilidad de desarrollar cáncer de piel. El doctor Daniel Feinsilber, jefe de Dermatología Oncológica del Servicio de Dermatología del Hospital Ramos Mejía de la Ciudad de Buenos Aires, explica cuáles son las consecuencias más frecuentes, cómo incide en el envejecimiento de la piel y qué tipo de medidas preventivas es importante implementar durante el verano.
(31/12/09 – Agencia CyTA-Instituto Leloir). –Durante el verano la exposición a la luz solar aumenta. Pese a los reiterados consejos de especialistas, miles de personas no toman los recaudos necesarios para protegerse de los rayos ultravioletas.
Es importante que la población tenga conciencia de que la exposición excesiva al sol acelera el envejecimiento cutáneo, y aumenta la probabilidad de desarrollar cáncer de piel, señala el doctor Daniel Feinsilber, jefe de Dermatología Oncológica del Servicio de Dermatología del Hospital Ramos Mejía de la Ciudad de Buenos Aires.
De acuerdo con el especialista, la causa principal de la aparición de cáncer de piel es la exposición continuada a la radiación ultravioleta, lo que produce a lo largo de la vida mutaciones genéticas. “En esos casos se activan los llamados oncogenes que en determinado momento empiezan a generar células malignas”, explica Feinsilber.
Asimismo destaca que ha aumentado la intensidad de los rayos ultravioletas debido a que la capa de ozono se ha visto alterada por determinados gases industriales. Otro factor que incide en el desarrollo del cáncer de piel es el aumento del reflejo de la luz solar en el asfalto y en los edificios de las grandes urbes. “A esto se suma la genética personal. El conjunto de estas variables -entre otras- hace a la mayor predisposición de desarrollar cáncer de piel y acelerar el envejecimiento cutáneo”, enfatiza el especialista.
Tipos de cáncer de piel
Principalmente hay tres tipos de cáncer de piel: el melanoma, carcinoma basocelular y el carcinoma espinocelular.
“El melanoma se origina en los melanocitos (células de la piel que producen melanina) de los nevos (lunares), o en los de piel sana. Cuanto más jóvenes somos -hasta los 30 años- predomina sobre nevos, y después sobre piel sana. Se trata de uno de los tres cánceres de peor pronóstico de los humanos, dentro de los más frecuentes. Por eso la prevención de los nevos y el diagnóstico precoz es tan importante”, explica Feinsilber. Y continua: “Por otra parte, el carcinoma basocelular se origina en la parte inferior de la epidermis, es de evolución lenta, tiene capacidad destructiva a largo plazo y se concentra en la cara en el 85 por ciento de los casos, mientras que el espinocelular se origina en las capas intermedias de la epidermis y puede afectar partes expuestas de la piel como la cara, el cuero cabelludo en personas con calvicie o en el dorso de la mano.”
Consejos prácticos
Feinsilber recomienda que nadie, sea cual sea la edad, se exponga al sol en forma directa en los horarios picos que van entre las 11 y las 16 horas.
“En esos horarios hay que estar bajo una sombra de tres metros de diámetro con un protector solar de factor no menor a 20. Cuanto más clara sea la piel, es recomendable que se aplique un factor mayor, entre 20 y 40. Asimismo se deben usar gafas de sol, y gorritos los que son calvos, también es recomendable llevar remeras”, afirma el experto. Y agrega: “Las criaturas menores de un año no deben nunca ser expuestas a la radiación solar dado que no tienen capacidad defensiva para los rayos solares. Después entre 1 y 3 años, es posible, pero fuera de los horarios pico. A partir de los 3 o 4 años con mucho cuidado se les debe dar máxima protección dentro de los horarios pico”, subraya el experto.
Asimismo recomienda ubicarse en lugares con pasto dado que no reflejan la radiación ultravioleta. “La arena húmeda refleja entre el 10 y el 15 por ciento. La arena seca refleja el 35 por ciento, las baldosas, las piedras, las rocas o el agua de espejo, reflejan el 50 por ciento y la nieve, el 70 por ciento”, señala Feinsilber quien enfatiza que la detección temprana y la prevención son las mejores armas para combatir el cáncer de piel.
Turistas en la playa
Crédito: EFE