Para mejorar el acceso a información de salud relacionada con el embarazo y el cuidado de los recién nacidos, investigadores de Argentina y Estados Unidos evalúan el uso de mensajes de textos.
(22/05/2013 – Agencia CyTA – Instituto Leloir. Por Bruno Geller)- Las mujeres embarazadas de bajos ingresos están interesadas en recibir mensajes de texto con información sobre cuidados antes y después del parto. Así lo reveló una serie de entrevistas realizadas en dos hospitales públicos de Santa Fe y Corrientes, y cuyos resultados acaban de ser publicados en la revista Reproductive Health.
“El celular forma parte de la vida diaria de las personas y constituye una oportunidad para mejorar la salud”, afirmó a la Agencia CyTA la nutricionista Gabriela Cormick, miembro del Departamento de Investigación en Salud de la Madre y el Niño del Instituto de Efectividad y Clínica Sanitaria (IECS), en Buenos Aires.
Cormick condujo el estudio sobre 146 mujeres embarazadas de Rosario (Santa Fe) y Mercedes (Corrientes). El 96 por ciento de ellas consideró “interesante” la idea de recibir orientación a través de SMS, especialmente sobre cuidados nutricionales. Las entrevistadas manifestaron también que querían información sobre cuidados para prevenir complicaciones durante el embarazo; patologías congénitas, hipertensivas e infecciones; lactancia materna y cuidados para la piel del bebé; y situaciones en las cuales resulta conveniente llamar al médico.
El trabajo se enmarca en un nuevo campo que se denomina Salud Móvil, el cual consiste justamente en la utilización de la telefonía celular para usos relacionados con la salud. Estrategias similares se han adoptado en Zanzíbar, Tanzania (WiredMothers), en Estados Unidos (Text4Baby) y Serbia (Beba Dolazi), donde mensajes de texto son enviados en diferentes etapas del embarazo a mujeres que están subscriptas a programas específicos.
De todas formas, Cormick reconoció que las personas que reciben los SMS necesitan tener un mínimo nivel de educación para garantizar su comprensión. En este sentido, el estudio evidenció que el 17 por ciento de la población entrevistada no había completado su escolarización primaria.
Entre los co-autores del estudio están la licenciada en estadística Luz Gibbons, los médicos obstetras José Belizán y Fernando Althabe, todos miembros del IECS, así como también la licenciada Alicia del Pino y colegas de la Escuela de Salud Publica de la Universidad de Tulane, en Estados Unidos. Contaron con el apoyo del National Center for Minority Health and Health Disparities de Estados Unidos.